¡Hala! Toma una bomba atómica en el título directo al estómago. Mil años repitiendo el mantra de que el contenido es el rey para que ahora venga este y diga que no. Que el contenido no es el rey. Y no solo eso sino que nunca lo ha sido. ¡Chúpate esa!

En honor a la verdad esto no es una idea mía, como veremos después. A veces necesitamos transgredir, revolucionar, ir un paso más allá para evolucionar. Y quedarnos sentados mientras escuchamos una frase hasta que se convierta en verdad se parece mucho a cómo cierta gentuza desliza mentiras o medias verdades para que se extiendan como un virus hasta convertirse en verdad de facto. O mejor dicho… en fake news. No. Por ahí no podemos pasar.

Qué hemos hecho estos años

Sabíamos que el contenido NO es el rey… pero lo olvidamos

La veneración del dios SEO no es nueva. Casi desde el principio de los buscadores el objetivo máximo del posicionamiento ha sido aparecer en los primeros puestos de las SERP (Search Engine Result Page).

Sin embargo desde la explosión de las Redes Sociales hace bien bien una decena de años larga parecía que el SEO pasaba a un segundo plano. La audiencia se masificaba en torno a Facebook y Twitter y para llegar a ella había que crear contenido que atrajera al usuario a cualquier precio. Y si había que pasar líneas rojas en forma de clickbaiting se pasaban y punto.

Ello hizo que se acuñara la frase de que «el contenido es el rey» ya que se entendía que cuanto mejor fuera el contenido se atraería con más facilidad a la audiencia y se aumentaría por tanto la posibilidad de iniciar el funnel de ventas con un lead. La cosa estaba clara. A mejor contenido, más atracción de audiencia, más interacción, más posicionamiento en Redes Sociales, más trasvase de usuarios a nuestras páginas y mejor posicionamiento en Google.

El vídeo es el rey de los contenidos pero el contenido no es el rey

Seguro que muchos de vosotros estaréis pensando qué narices hacéis aún aquí. Habéis venido a un blog que no ha parado de machacar que el contenido es el rey y que el vídeo es el rey de los contenidos. ¿Ahora resulta que nada de esto es cierto? ¿que el contenido no es el rey y he perdido el tiempo tontunamente? ¡No hija, no!

Lo único que ha pasado es que hemos de abrir la mente. El vídeo sigue siendo el contenido que más resultados cosecha. Y es muy fácil hacer la prueba. Haz un contenido con texto, audio, vídeo… todos tratando de lo mismo y verás que con el vídeo obtienes los mejores resultados. El quid de la cuestión es el trabajo previo. Aquello que nos conduce a la realización de tal o cuál contenido. La acción que desencadena la reacción.

Y después de todo este tochaco supongo que muchos de vosotros estaréis esperando que diga la frase. Vale, el rey siempre ha sido el SEO. Pues no. Nada de eso. Y no quiere decir que no tenga importancia. La tiene y mucha. Pero incluso Google y sus algoritmos han de hincar la rodilla de vez en cuando.

El usuario es el rey

El rey siempre ha sido el mismo y lo teníamos en los morros

El caso es que creo que todos sabemos la respuesta, solo que estamos tan obnubilados con crear el contenido perfecto con el SEO perfecto que perdemos de vista lo que de verdad importa. Aquello alrededor de lo que gira todo. Incluso el omnipotente algoritmo de Google.

No es algo que no sepamos ni mucho menos. Solo que hemos dejado que se vaya solapando por otros temas hasta formar una bola opaca (imaginemos el material que queramos) que no nos deja ver más allá de la nariz.

Imaginad lo absurdo de la situación. Creamos un contenido que intenta adecuarse a un algoritmo que a su vez intenta emular al máximo la manera de pensar humana. Es estúpido a más no poder. Veneramos una matemática absurda que intenta parecer humana cuando hemos olvidado que somos nosotros los humanos y que creamos contenido para humanos.

Para mí el velo empezó a resquebrajarse cada vez que yo mismo repetía una y otra vez que un vídeo per se no te va a solucionar nada si no aportas valor. Puedes hacer el vídeo más molón del mundo que si el tema no interesa a nadie será un pestiño sí o sí porque nadie va a buscar el tema.

Donde definitivamente vi de nuevo la luz fue en una conferencia de Cristóbal Rodriguez en Barcelona. Él hablaba más de márketing en lo práctico y propuso un modelo que al aparecer en mi mente parece que acabó por desbloquearla. El contenido no es el rey y el SEO tampoco. El rey siempre ha sido, es y será el usuario. O para nuestro caso, la audiencia.

Luego me puse a investigar más el concepto y vi que más gente ya se había quitado el velo de la cara. Es más.. parece que esto es como un ciclo que se va repitiendo cada X años cada vez que perdemos el norte y a alguien como Pablo Guerenabarrena o Ginés Mayol le da por darnos una colleja para volver al redil.

Ginés además propone una frase que me encanta

Si el contenido es el Rey, entonces el usuario es la Reina, y ella es la que manda ?

Ginés Mayol

Yo lo cambiaría un poco en mi estilo

Si el contenido es el Rey y el SEO el príncipe, el usuario puede mandar al contenido a dormir al sofá y al SEO ponerle la comida en el tupper para el cole si no se la come ipso-facto.

Zapa en un momento de inspiración

Nos olvidamos de la web 2.0

Sigamos con el ejercicio de absurdez y utilicemos absurdamente Google para buscar «el contenido no es el rey». Resultados hay incluso desde 2011 pero la mayoría parecen como dardos de una diana que apenas dan en el centro. Unos le dan la varita mágica a Google, otros al contenido «efectivo» (el que vende), otros a la reputación online…

Todos, absolutamente todos olvidan que todo se origina en el mismo punto que es el que va a condicionar todo el flujo de información. Lo peor es que, como hemos visto, este concepto no es nuevo. Incluso gente que no le ha ido mal en la vida como Mark Zuckerberg lo puso en práctica con cierta red social hacia 2006.

No fue el único. Los inicios del milenio vieron cómo se forjaba una revolución en Internet en la que se empoderaba al usuario y se le daba la opción de crear su propio contenido. De nuevo partíamos del usuario.

¿Y ahora qué?

Ahora hay que seguir. No hemos hecho nada mal. Nuestras estructuras de trabajo son las correctas. Lo único que muchas veces perdemos de vista (no siempre y no todos, por supuesto) es para quién trabajamos. No trabajamos para Twitter, ni Instagram ni Google. Estos son tan solo canales y herramientas para llegar a alguien. El SEO es importante. No; muy importante. Pero el usuario lo es incluso más. No lo olvidemos otra vez (po favó).

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Zapa

Propietario y fundador de Streamyng.

Especialista en desarrollo y arquitecturas de productos audiovisuales corporativos.

Apasionado de las nuevas tecnologías, Internet y todos los cachivaches que caigan en sus manos.