Así que quieres crear vídeos profesionales con tu móvil ¿eh? Pues sí. Es posible y además estás en el sitio adecuado. Y es que mis abuelos ya lo decían, que la tecnología avanza una barbaridad. Y sin que nos demos cuenta resulta que tenemos en nuestras manos una herramienta a la que le podemos sacar mucho más jugo de lo que pensamos. Simplemente hay que tener ganas de aprender.
En una situación común cuando utilizamos nuestro smartphone para grabar vídeo solemos dejarlo en modo auto y desentendernos. Es normal si no tenemos ganas de liarnos. Pero luego nos encontramos con escenas oscuras, movidas, con mal sonido… E intentamos arreglar algo en edición y no hacemos más que empeorarlo porque aparece como un «grano» o un ejambre de moscas que hace que el vídeo parezca de todo menos apetecible. Y eso a nuestra marca… pues como que no le sienta bien. Si queremos que nuestro vídeo sea atractivo hemos de intentar que sea lo más profesional posible. Y esto podemos hacerlo con medios modestos hoy en día.
¿Recuerdas aquello de ‘más vale prevenir que lamentar’? Pues de eso trata este artículo. De armarte con estos consejos para que luego cuando veas el resultado del vídeo te quedes ojiplático y tengas ganas de más y más. Atención porque estás a punto de ser protagonista del típico ‘antes y después’ que te cambiará la vida.
La norma de oro para crear vídeos profesionales con tu móvil
He separado en tres apartados estos consejos para crear vídeos profesionales con el móvil y si te fijas bien se corresponden con medidas que podemos tomar en todo lo que podemos controlar: condiciones ambientales, ajustes de cámara y técnicas de edición. Sin embargo casi podríamos resumir toda esta historia en una regla de oro que cobra más fuerza aún cuando no estamos utilizando herramientas que valen miles de euros. Si quieres la máxima calidad, intenta que en la edición solo tengas que cortar y pegar. Desde el momento 1 que cambias contraste, brillo, color o intentamos arreglar en la postproducción los errores que hemos cometido en producción, la calidad visual de nuestro vídeo caerá tanto que difícilmente podremos decir que sea profesional. Esto es así simplemente porque las herramientas que usaremos están pensadas para usar y compartir directamente el vídeo grabado tal cual y no para pasar por los mismos procesos que un vídeo profesional.
Controla tu entorno
1. Iluminación
Si tuviéramos que apostarlo todo a uno de los consejos de esta lista sin duda lo apostaría a este. Con presupuestos ajustados o mínimos siempre va a valer la pena destinar la mayor parte de él a un sistema de iluminación que cubra mínimos. Os aseguro que la diferencia con los vídeos grabados con luz ambiente es abismal. Primero porque gracias a ello vamos a poder distinguir claramente los objetos y personas que vamos a grabar y luego porque nuestro smartphone no está diseñado para ser usado en condiciones pobres de iluminación y siempre lo agradecerá ofreciéndote a cambio una imagen más nítida y definida.
Créditos: Wikipedia
Esto que ves a tu derecha es el esquema clásico de iluminación que va a salir en todos los documentos y libros que hablen del tema. Es el sistema estándar de tres puntos de iluminación. Se usa una luz principal (key), una de relleno (fill) y una de contraluz para resaltar la silueta (backlight). No nos liemos. Baste decir que necesitaremos tres focos. Dos delanteros de los que uno de ellos va a dar una luz más potente y uno trasero.
La buena noticia es que hay kits muy baratos a nuestro alcance. Por supuesto no van a ser de la misma calidad que unos focos de estudio pero la diferencia entre tenerlos y no tenerlos será abismal y una vez hecho el vídeo va a dar el pego.
Kit de Iluminación básico
Hay que ir con mucho cuidado ya que es norma general que las bombillas baratas acaben durando muy poco. Realmente un kit de dos focos con sus soportes puede salir tan barato como por 53€ aunque nosotros optaríamos por unos paneles LED cuyo kit de 3 unidades subiría a los 200€
2. Sonido
Tan importante para que todo se vea bien es que se oiga bien. Vamos a olvidarnos de los micrófonos incorporados y optaremos por alguna de las múltiples soluciones que podemos encontrar para smartphones. La diferencia la notaremos al momento. Sonido con menos eco, más claro y con una gama más rica de tonalidades.
Micrófono de Solapa
Un micrófono como el de la foto puede salir por 24€. Es muy importante que nos aseguremos que el micrófono funcionará con nuestro dispositivo móvil puesto que depende del conector podría no ser compatible. Los hay de tres terminales (TRS) y de 4 (TRRS). Sobre todo en usuarios de Apple esto puede ser un serio problema. En cualquier caso hay que preguntar siempre al vendedor o a la marca directamente para asegurarnos el correcto funcionamiento en nuestro dispositivo.
3. Estabilización
Es muy sencillo. Simplemente no sostengas el teléfono con la mano. Y sobre todo si has de trabajar con un vídeo que no es estable no intentes usar un programa de estabilización a menos que sepas bien lo que estás haciendo. Estos programas recurren sobre todo a hacer zoom sobre la imagen para que no se vean bordes negros y eso afecta muy negativamente a la calidad. Si quieres hacer la prueba abre una foto en un programa de retoque fotográfico y hazla bien bien grande. Exacto… eso es lo que está haciendo.
Trípode o soporte Octopus
Los octopus se han puesto de moda hace ya tiempo dado su bajo coste y versatilidad. Podemos usarlos en cualquier teléfono y sobre cualquier soporte lo que nos podrá ofrecer ángulos muy curiosos además de los típicos encuadres. Podemos encontrar modelos a partir de 10€. A tener en cuenta la fragilidad y peso del trípode. Hemos de asegurarnos que va a aguantar el peso de nuestro smartphone sin problemas.
En nuestro smartphone
Los ajustes de nuestro móvil. Esos grandes desconocidos… de los cuales podemos extraer una calidad sin igual. Sin duda es nuestro gran aliado y en gran manera posibilita nuestra meta de creación de vídeos profesionales en el móvil. Como entendemos que puede ser muy tedioso aquí te explicamos directamente lo que hay que tocar.
4. Dimensiones
Optaremos siempre que sea posible por un formato de Alta Definición (HD) en 1080p. O lo que es lo mismo 1920×1080 píxeles. Este formato además de ser el estándar y el que más definición ofrece puede servirnos luego para ajustar planos. Un truco que se suele hacer es grabar a 1080p y luego editar en un formato más reducido como 720p. Como el clip grabado será más grande que el vídeo final, siempre podremos jugar en el programa de edición para ajustar alguna toma que no nos haya gustado, sin merma de calidad.
Ajustar el tamaño de imagen
Este ajuste se encontrará normalmente dentro de las preferencias de la app que utilices para tomar imágenes. Puede venir con diferentes nombres, por ejemplo 1080p o 1920×1080 o Full HD.
5. Vídeos horizontales
¿Alguna vez viste un vídeo en vertical antes que se popularizara el vídeo en el smartphone? No. Y eso es porque el formato de vídeo que mejor se adapta a nuestro campo de visión es el rectangular. Es por ese motivo que las películas son en formato rectangular (llamémosle ya panorámico) y la TV pasó hace algunos años del formato cuadrado al panorámico también. Así que podrás entender que a los profesionales del vídeo nos salga una urticaria nivel volcán cada vez que vemos uno. Sin embargo en Redes Sociales cada vez se extiende más. ¿Qué hacer?
Guía para vídeos verticales
Es un gran dilema porque el vídeo vertical es el que mejor se adapta a los smartphones. Así que sí. Haremos vídeos verticales pero siguiendo estrictamente las indicaciones para que no nos quede un «triple H» (horrendo, horrible, horripilante). De hecho el tema es tan delicado que en su día le dediqué un artículo entero y que puedes consultar en
este enlace.
6. El zoom no existe. Repite conmigo. El zoom no existe
Y es que el zoom es otro de esos artilugios que el diablo a puesto a nuestra disposición para causar destrozos. Y no hablemos ya del zoom digital (aquel que aún cuando la lente ha llegado ya a su límite físico, se basa en algoritmos matemáticos para inventarse una imagen de lo que se supone que sería un zoom aún más largo que el de la lente).
Acerca el móvil lo necesario
Y es que la solución es bien sencilla. Si Mahoma no va a la montaña, la montaña irá a Mahoma. Si necesitamos que la imagen sea más grande simplemente pondremos el móvil con el zoom al mínimo y nos acercaremos o alejaremos del objeto a pie guiándonos por lo que vemos en pantalla para componer la escena.
7. Enfoque automático. El otro hijo del diablo
Ahora enfoca. Ahora no. Ahora un poco. Ahora enfoca algo que no me interesa. Ahora pasa alguien o algo por delante del objetivo y se desenfoca. Te suena de algo, ¿verdad? Tu problema tiene nombre y se llama Autofocus. En efecto… otra de esas armas cargadas por el diablo. No negaremos que en el día a día es muy útil y normalmente realiza su función de manera solvente. Pero aquí estamos hablando de crear vídeos profesionales con el móvil y no podemos permitirnos que en medio de una toma nos ocurra.
Usa el enfoque manual
Solucionarlo es muy sencillo. Tendremos que ir de nuevo a los ajustes de nuestra app de vídeo y seleccionar la opción de enfoque manual. Una vez seleccionada pondremos el móvil en el trípode y compondremos la escena. Es ahora cuando tendremos que ir ajustando el enfoque hasta que la imagen quede perfectamente nítida. Cuando empecemos a grabar nada ni nadie perturbará el enfoque y el diablo, aburrido, se volverá a su cueva.
En nuestro programa de edición
En este último apartado te contaré tres sencillos trucos a tener en cuenta si has de manipular tu vídeo para cortarlo o empalmarlo con otros vídeos. Si aún estás en la fase de escoger programa para editar te recomiendo que te pases por este artículo donde entre otras cosas analizo unos cuantos editores de vídeo gratuitos.
8. Sin filtros
Un defecto que tienen las personas que empiezan a editar vídeo es que se vuelven locos cuando descubren los filtros y efectos. Todos son bonitos. Todos son preciosos. ¡Y los queremos ver todos a la vez! Lo que ocurre realmente es que empobrecemos la imagen y distraemos a la gente sobre nuestro objetivo principal.
Retoques los justos
Recuerda que cada retoque que hagamos a la imagen va a empobrecer su calidad al estar trabajando con un formato que no es el adecuado. Así que intentemos que todo quede solucionado en la fase de grabación. Los efectos tipo estrellitas, chispitas, gafas superpuestas o caras de conejo han de quedar desterrados de tu mente ya que quitan credibilidad a tu producto. Una imagen clara, bien tratada, bien iluminada y con mínimos retoques será nuestra aliada a la hora de crear vídeos profesionales con el smartphone.
9. No uses transiciones
Otro de los virus que puede contraer el editor de vídeo primerizo es el de abarrotar su vídeo de transiciones entre clip y clip convirtiéndolo en algo peor que el vídeo de bodas de tu cuñado. Corazoncitos, estrellas, capricornios arcoirisados… todo vale para que entre clip y clip de vídeo tengamos esos segundos de WTF en toda regla. Amigos, hay que ser coherentes. Si queremos que nuestro producto audiovisual entre bien por los ojos hemos de evitar a toda costa estos malos hábitos.
Corte y fundido
La mejor transición del mundo siempre será la del clásico corte. Así que siempre que lo necesitemos y podamos usaremos este cambio de escena simple, rápido y sencillo. Hay veces, sin embargo, que la diferencia entre plano y plano hace que la transición por corte de una sensación de «salto» de plano. Quizá los planos son muy parecidos o quizá no se planificó bien la posición de la cámara. En cualquier caso podremos recurrir entonces al fundido como transición de recurso.
10. Utiliza una buena banda sonora
¿Cómo? ¿Música? A lo mejor ni habías pensado en ello ¿verdad? O a lo mejor has puesto el último éxito de U2 (porque tú lo vales) y no te has parado a pensar lo que está haciendo Youtube con tu vídeo. En el mejor de los casos lo estará monetizando para que el amigo Bono se lleve sus dinerillos. En el peor te habrá enviado lo que se conoce como copyright strike tumbando tu vídeo hasta que no lo ‘arregles’. Y cuidado porque si acumulas strikes… da tu canal de Youtube por muerto.
Música buena y barata para YouTube
La solución es sencilla.
Usar música libre de derechos de autor con una licencia que te permita incluirla en obras comerciales. Basta una búsqueda de Google para ver que sitios que ofrezcan este tipo de música hay muchos. Algunos la ofrecen gratis pero por lo general la buena música de calidad vale dinero que puede oscilar entre los 0€ por canción en
Danosongs a una cuota mensual como la de
Epidemic Sound de 13€/mes con la que puedes usar su extensísimo catálogo que es además de buena calidad.
¿Qué te han parecido estos consejos? Espero que muy útiles ya que salen directamente de mi experiencia. Lo más importante aquí es que pierdas el miedo y veas que realmente es posible crear vídeos profesionales con tu móvil. Explícame cómo ha sido tu experiencia en los comentarios y si tienes dudas intentaré ayudarte. Un saludo y ¡Videomarqueteros, hasta la próxima!
Propietario y fundador de Streamyng.
Especialista en desarrollo y arquitecturas de productos audiovisuales corporativos.
Apasionado de las nuevas tecnologías, Internet y todos los cachivaches que caigan en sus manos.
2 Comments
jajaja, Me encanta, muy buenos consejos y abordando todos los temas para los que no tenemos ni idea. Y buenísimo el humor con el que está escrito! Gracias!
Gracias, Ana! Esperamos verte a menudo por aquí! ??
Información básica sobre protección de datos
Responsable » Carlos Zapater
Finalidad » Gestión de dudas y servicios a cliente
Legitimación » Consentimiento del interesado
Derechos » Tienes derecho a acceder, rectificar y suprimir los datos, así como otros derechos, como se explica en la información adicional
Información adicional » Puedes consultar la información adicional y detallada sobre Protección de Datos Personales en mi página web streamyng.com